Esponjosos pancakes bajos en carbohidratos con harina de coco

Estos pancakes son esponjosos y ligeros, con un muy ligero sabor a coco. Realmente si no supiera que llevan harina de coco pensaría que son pancakes hechos con harina de trigo.

No os voy a mentir, de vez en cuando me gusta comer cosas dulces. Yo creo que a todos nos pasa esto, ya que vivimos en una sociedad donde comer cosas dulces es algo normal y creo que también es algo que va en nuestro ADN.

Las cosas dulces engordan y por eso están tan ricas, para que engordemos y podamos pasar el invierno sin problemas. Esto tenía todo el sentido del mundo cuando lo único dulce en este planeta eran las frutas, pero ahora con tantos productos hiperprocesados, comer cosas dulces se ha convertido en un problema para la salud. Por esta razón, creo que aprender a cocinar bizcochos, tartas y postres sin azúcar es la manera de seguir teniendo nuestros placeres, pero sin poner en riesgo nuestra salud.

Encontrar buenas recetas sin azúcar ni harina de trigo puede resultar problemático, porque suelen ser secas y a mi personalmente me parece que son demasiado pesadas. Muchas utilizan harina de almendras que tiene mucha grasa y proteínas lo que hace que, aunque estén muy ricos mientras de los comes, después de un rato sientes q la barriga de va a estallar.

Por esta razón, yo prefiero utilizar harina de coco, tiene un poco más de carbohidratos, pero la textura se parece más a la de la harina de trigo sobre todo en recetas de repostería.

Muchas veces cuando hago experimentos en la cocina, tengo bastante suerte, en este caso cogí la primera receta que encontré de pancakes por internet y cambié los ingredientes un poco y en el segundo intento logré estos pancakes que están de muerte.

Un pancake perfecto debería ser esponjoso, blandito y ligeramente mojado y esta receta cumple todas estas cualidades, si no os gusta el sabor del coco, sinceramente no tienen demasiado sabor a coco y podéis enconder el sabor utilizando cosas como canela, cascara de limón o extracto de vainilla.

No os voy a mentir, esta receta no es exageradamente rica en micronutrientes, porque para eso está la carne (sobre todo los órganos), pero sirve para quitarse el antojo de algo dulce y no comer algo peor procesado. Los micronutrientes más abundantes (entre un 50 y 80% de la cantidad recomendada diaria) en esta receta son la vitamina B2, la colina y el selenio. También tiene entre un 20 y un 33% de la cantidad recomendada diaria para otros nutrientes como las vitaminas: B5, B12, A y D.

Espero que los probéis porque realmente están riquísimos y de textura perfectos.