Qué es la alimentación baja en carbohidratos
La alimentación baja en carbohidratos se basa en obtener la mayor parte de la energía que necesita el cuerpo a partir de grasa. Antes de continuar con esta entrada, si tenéis alguna duda sobre que son los carbohidratos y como actúa nuestro cuerpo cuando los comemos, os invito a leer la siguiente entrada: ¿Qué son los nutrientes?.
En la actualidad la mayor parte de la energía que consume una persona viene de los carbohidratos (pasta, pan, arroz, patata/papa, legumbres), pero esto no siempre ha sido así. Los homínidos llevamos poco más de 2 millones de años en la tierra y solo hace 200 mil años empezamos a comer cereales (antepasados del arroz o trigo actual), antes de eso solo se comían animales (sobre todo los interiores del animal), frutas que apenas tenían dulzor y verduras que eran fibrosas y duras. Si queréis saber más acerca de que comían nuestros antepasados puedes leer las siguientes entradas:
Hasta hace relativamente poco, aún quedaban tribus como los maasai en África o los inuit en el norte de Canadá que seguían comiendo de esta manera. Cuando los científicos hace unos 60 años empezaron a estudiar estas tribus que aún no se veían influenciadas por la dieta occidental estándar, se dieron cuenta que eran personas muy sanas, con unos niveles de colesterol bajo, a pesar de comer grandes cantidades de grasas saturadas y colesterol.
Los humanos no estamos hechos para comer tantos carbohidratos
Como comenté antes, los seres humanos llevamos poco tiempo comiendo carbohidratos, lo que nos da una idea de que realmente no estamos hechos para comerlos en grandes cantidades. Pensad que absolutamente todo lo que comemos hoy en día lo hemos “modificado” genéticamente los humanos. No lo hicimos en un laboratorio como se haría hoy en día, pero guardábamos y sembrábamos las semillas de las frutas más dulces o de las verduras más tiernas para producir frutos cada vez más dulces y verduras más tiernas. Para que os hagáis una idea, en el paleolítico la fruta más dulce habría sido del tamaño de un tomate pequeño y habría sido tan dulce como una zanahoria. Además, estaba disponible solo durante el verano, no había aviones para traer mangos desde la otra punta del mundo.
Un claro indicador de que los seres humanos no estamos hechos para comer tantos carbohidratos son las tasas cada vez más elevadas de diabetes tipo 2. ¿Sabíais que antiguamente a la diabetes de tipo 2 se le llamaba la diabetes de la tercera edad? En la actualidad ya no tiene ese nombre porque incluso los niños la tienen. Es triste que un niño pequeño tenga que vivir con una enfermedad así, más aun cuando se trata de una enfermedad totalmente evitable. Si queréis saber vuestro riesgo de padecer diabetes, medid la circunferencia de vuestra cintura, cuanto mayor sea más riesgo tendréis de padecer diabetes. Y si vuestra barriga es dura peor aún, porque lo que hay dentro de esa barriga dura es líquido retenido causado por la inflamación.
Gluconeogénesis: creación de nueva glucosa
Mucha gente os dirá o vosotros mismos podéis estar pensando que no se puede vivir sin carbohidratos. Esto es totalmente falso, ya que el cuerpo humano puede generar glucosa (un tipo de carbohidrato) a partir de proteínas y grasas, a este proceso se le llama gluconeogénesis (Wikipedia Gluconeogénesis). Así que no hay que preocuparse por no comerlos. Es más, los carbohidratos causan bastante daño al cuerpo, claros ejemplos de ello son enfermedades como la diabetes tipo 2 y las caries. En siguientes entradas explicaré más a fondo estos temas, pero de momento os quería explicar en qué consiste a grandes rasgos la alimentación baja en carbohidratos. Espero que haya sido interesante, cualquier duda o pregunta ya sabéis que podéis hacérmela en YouTube o Instagram.
¡Hasta otra, bye!
